Nuestro equipo se dio a la tarea de investigar cuál es el panorama de la nanotecnología para Latinoamérica y para ello entrevistamos a uno de los expertos en el tema. El Dr. Miguel Ángel Méndez Rojas (Coordinador del programa de Nanotecnología e Ingeniería Molecular en la Universidad de las Américas Puebla) nos platica sobre su perspectiva del futuro de la nanociencia en Latinoamérica contra el resto del mundo.
-Dr. Miguel Ángel, comparado con el resto del mundo, ¿cómo se ve el panorama para Latinoamérica en cuestión de inversión para la investigación y desarrollo de la nanotecnología?
Es un panorama incierto en estos momentos, no por capacidades (recursos humanos, infraestructura) sino principalmente por los apoyos financieros. En América Latina existen grupos de investigación, así como programas de posgrado y laboratorios con equipamientos que los ponen entre los más competitivos a nivel mundial, realizando investigación en temas de frontera. Pero los apoyos económicos (mayoritariamente provenientes de los gobiernos, pues la participación del sector privado es incipiente) limitan el impacto. En ese sentido, podríamos ver lo anterior como un área de oportunidad: si empresas del sector privado, nacionales o extranjeras, invirtieran en el desarrollo de proyectos de investigación en Nanotecnología en la región Latinoamericana, se encontrarían con una excelente relación costo/beneficio, pudiendo generar productos que satisfagan no solamente las necesidades del mercado regional, sino también competir exitosamente en el mercado internacional. Hay una alta probabilidad de que se desarrollen empresas productivas de alta tecnología, que podrían nutrirse del talento local, así como de desarrollar vinculaciones importantes entre las instituciones de educación superior (públicas y privadas), disminuyendo con esto la dependencia tecnológica del exterior.
-Desde su punto de vista, ¿qué hace falta para alcanzar a las grandes potencias?
Un programa ambicioso y visionario de desarrollo y fortalecimiento de las capacidades de formación de recursos humanos de alto nivel, no solamente en el nivel superior y posgrado, sino también desde el nivel básico, similar a las estrategias nacionales implementadas por otros países como Australia o China. La creación de nodos de investigación y de servicios tecnológicos regionales (nacionales y de cooperación internacional) que permitan la integración de capacidades de investigación y desarrollo, así como una estrategia que facilite la generación y apoyo de empresas tecnológicas innovadoras para que puedan superar exitosamente los primeros años (que son los más difíciles), permitiéndoles consolidarse y competir local e internacionalmente, mediante créditos a fondo perdido, acceso a infraestructura existente en universidades, a cambio de emplear a talento generado en las mismas, puede constituirse en una estrategia exitosa, vinculante y que permitiría generar impactos y beneficios inmediatos, en especial si se pueden vincular no solo a las necesidades del país, sino de la región latinoamericana (alimentación, acceso al agua potable, energías alternativas, salud humana, etc).
-¿Cuál cree usted que es el futuro para esta tecnología?
Yo creo que el futuro de la Nanotecnología es muy claro: apoyar a la búsqueda y desarrollo de soluciones a algunos de los problemas más apremiantes de la sociedad (en especial problemas comunes a la región Latinoamericana). Es una revolución en proceso, en donde tenemos la oportunidad de sumarnos y ser competitivos en una escala global, pero con impacto local y regional. Es importante que, como región, los países latinoamericanos encontremos estrategias de cooperación y trabajemos juntos para convertirnos en un actor competitivo en la nanociencia y nanotecnología globales. En el fondo es más que solamente buscar recursos económicos, es desarrollar una visión común de cómo y en qué aplicar los productos de la investigación para la resolución de los problemas comunes que como región compartimos.
En My Nano Academy compartimos la visión del Dr. Méndez y creemos que, en Latinoamérica, se tiene que exhortar a las organizaciones para incorporar la nanotecnología como una herramienta de innovación que nos permita dar solución a nuestras principales necesidades.
Dr. Miguel Ángel Méndez Rojas (Coordinador del programa de Nanotecnología e Ingeniería Molecular en la Universidad de las Américas Puebla)